Los armarios industriales se enfrentan a condiciones difíciles, especialmente en el mercado global actual, en el que los patrones climáticos inestables y las condiciones naturales peligrosas se están volviendo cada vez más frecuentes a causa del cambio climático.
Los ingenieros industriales saben que el entorno de fabricación plantea una serie de retos para la integridad de la infraestructura de los armarios de control: desde variaciones de temperatura y condiciones atmosféricas extremas a corrosivos aerotransportados y líquidos y otros contaminantes externos.
La protección de la infraestructura de los armarios de control nunca es sencilla, especialmente en 2021, ya que una mayor parte de esta infraestructura está ligada a la industria 4.0 y al IoT. Por ello, seleccionar el armario industrial correcto es clave, pero dicho proceso decisorio es más fácil de decir que de hacer cuando consideras las variables en juego, tanto externas (ambientales) como internas (de funcionamiento en una instalación determinada).
Esto plantea la siguiente pregunta:
La clave para entender y seleccionar el armario más efectivo, eficiente y que impulse un mayor valor es identificar y evaluar las variables de tu entorno, entender la conectividad de estos armarios con otros componentes de tu infraestructura y seleccionar un armario que pueda soportar las fluctuaciones climáticas y de las condiciones ambientales mientras que reduce tu vulnerabilidad frente a averías o interrupciones en el trabajo.
Existen numerosos elementos y contaminantes ambientales que pueden afectar al rendimiento y a la duración de un armario de control industrial. Algunas de estas sustancias externas son el agua, el polvo, la suciedad, el aceite y otras partículas aerotransportadas. Cada una de ellas puede dañar significativamente el armario y los equipos electrónicos asociados e integrados en el armario y, por tanto, dejar una infraestructura industrial entera expuesta a un mayor riesgo de avería o fallo.
Para combatir la penetración de estas sustancias externas, el VX25 de Rittal utiliza un sistema con juntas de poliuretano in situ para garantizar un sellado perfecto y completo del armario, independientemente de los factores ambientales o climáticos. Así se forma una barrera permanente y un cierre sin fisuras que crea una gran contención y una retención de memoria como protección frente a las dificultades de los entornos industriales, además de evitar la entrada de sustancias potencialmente peligrosas o dañinas.
Asimismo, las opciones de estructuras de chapa de acero y acero inoxidable ofrecen un grado de protección IP y NEMA (Asociación Nacional de Fabricantes Eléctricos) con la flexibilidad práctica para adaptarse a las cambiantes demandas del variable panorama industrial.
La infraestructura de los armarios de control se enfrenta a dificultades relativas a la temperatura en dos frentes: el primero, es que la temperatura interna se ve afectada por el calor que genera el funcionamiento de los dispositivos del armario de control y, el segundo, que la temperatura externa o ambiente también afecta al armario y a los paneles de control operativos.
Por ejemplo, un mero aumento de 10 grados en la temperatura de funcionamiento puede dar como resultado deficiencias operativas o incluso averías, pero un aumento sostenido en este nivel también puede tener un impacto en la vida útil general del armario. El control de la temperatura y la capacidad de supervisarla y ajustarla con base en los factores externos o internos es también una cuestión de consumo de energía y, en consecuencia directa, del coste asociado con el funcionamiento general, dos factores que los fabricantes industriales deben tener muy presente en un mercado competitivo.
La línea de soluciones de refrigeración de Rittal para la gestión térmica basada en el armario y en la sala es totalmente compatible con el VX 25 y utiliza soluciones como sistemas de ventiladores y filtros, refrigeradores, intercambiadores de calor, chillers y una extensa gama de accesorios.
Dado que entre el 30 y el 50% de los costes energéticos se atribuyen a los sistemas de refrigeración, los diseños de Rittal incorporan la máxima eficiencia de refrigeración en cada solución para garantizar que el delicado equilibrio del punto de condensación entre la temperatura de carga y la temperatura ambiente se mantiene, evitando la condensación dañina de los armarios de control.
Cuando se requieren tareas de lavado, los armarios de control deben protegerse. Los limpiadores químicos agresivos, el agua caliente o a alta presión y los procesos de limpieza frecuentes pueden someter a los armarios a un posible desgaste dañino. Sin embargo, las capacidades de cierre impermeable de Rittal protegen los componentes vitales de los armarios de control frente a daños excesivos a causa de los procedimientos de limpieza más rigurosos.
Dichas capacidades de sellado y la capacidad de soportar procedimientos de limpieza intensivos sitúan a Rittal en una posición exclusiva en el sector de alimentación y bebidas, donde los armarios deben adherirse a las normas y ser aptos para uso alimenticio, y en el que las vigorosas prácticas de saneamiento son parte integral del sector.
Dependiendo de si un armario industrial se encuentra en el interior o en el exterior, la corrosión puede ser un factor decisivo que merme la durabilidad del armario. Factores externos como el sol, la nieve, la sal o los productos químicos pueden dañar la parte externa de algunos armarios, y los ácidos, disolventes, alcalinos, aceites y productos químicos industriales pueden amenazar la integridad de los armarios que se encuentren en las plantas de producción.
Los ingenieros de Rittal han diseñado e implementado un proceso de pintura en tres pasos para combatir cualquier tipo de daño por causas ambientales. Al igual que los procesos utilizados en el sector automovilístico, primero se aplica una imprimación de capa fina electroforética, tras lo cual le sigue una nanocapa de imprimación en dos partes y, por último, un recubrimiento en polvo final. Esta práctica proporciona una barrera externa acabada en el VX25 para cualquier clima o entorno interior o exterior.
En el panorama industrial actual, hay una amplia variedad de materiales que las empresas usan para la fabricación de armarios y cada material proporciona su propio conjunto de propuestas de valor basándonos en el entorno o al contexto en el que el armario se va a instalar. Como brevemente comentamos antes, el VX25 de Rittal aprovecha dos materiales de fabricación distintos (chapa de acero y acero inoxidable) para ofrecer el mayor nivel de flexibilidad integral y manejabilidad para el usuario.
La estructura de acero inoxidable 316 del VX25 de Rittal ha demostrado ser inmune a los entornos más corrosivos y superior a los materiales con menos acero o con revestimiento en polvo. Además, el acero inoxidable 316, combinado con el acabado en tres fases, ha demostrado su durabilidad en las condiciones más extremas, y su diseño de una sola pieza proporciona una capacidad de carga de 1.360 kg a la vez que ofrece lo último en flexibilidad y adaptabilidad.
Además, la protección ambiental que aporta el VX25 de Rittal se ha probado sobre el terreno en más de 10 millones de instalaciones en sectores como el de alimentos y bebidas, automovilístico, transporte y fabricación, así como en otros verticales en los que la protección ambiental para los armarios industriales es crítica para la estabilidad operativa. Los armarios industriales de Rittal cuentan con todo aquello que se busca en la ingeniería industrial actual: estabilidad, durabilidad, funcionalidad y la rentabilidad necesaria para competir en el ámbito global.
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