No es un momento fácil para los fabricantes, el rendimiento real experimentó un descenso en 2022 y hemos podido sentir también un efecto similar en 2023. Es innegable que las presiones provocadas por la inflación y los retrasos en las cadenas de suministros siguen siendo una fuente de preocupación.
Sin embargo, el dato que tal vez no esté tan presente para un amplio público es que este pasado mes de julio ha sido registrado por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Servicio de Cambio Climático Copernicus de la Unión Europea como el mes con temperaturas más elevadas.
Sin asumir una posición alarmista, se trata de un serio problema que no podemos ignorar. En todo el mundo se puede apreciar un aumento creciente de las temperaturas que supondrán un gran impacto para los equipos eléctricos.
En el caso de una avería del sistema de refrigeración, el equipo automático para situaciones críticas forzará un apagado para evitar que los componentes sufran más daños y las líneas de producción se detendrán, lo que no solo afectará de manera inmediata a la productividad, sino que también implicará una serie de elevados costes añadidos para volver a poner en marcha la planta.
Independientemente de lo duras que puedan resultar las condiciones comerciales, la omisión del mantenimiento esencial de los refrigeradores eléctricos casi siempre se traducirá en una economía falsa.
Algunos de los beneficios más comunes que proporciona el mantenimiento habitual:
- Cumplimiento de garantías: los fabricantes de equipos de refrigeración suelen tener como requisito el mantenimiento del equipo de acuerdo con sus directivas durante el periodo en el que la garantía es efectiva, Además de ser en la gran mayoría de los casos un requisito para obtener una extensión en la cobertura.
- Un mayor ahorro: como ya hemos indicado, el equipo eléctrico es extremadamente delicado al calor. Por lo que un mantenimiento de los refrigeradores ayudará a garantizar que los PLC y los variadores operen en su rango de temperatura óptimo, lo que mejorará su eficiencia y durabilidad.
- Encontrar recambios para la sustitución: conseguir recambios para la sustitución puede no ser fácil, sobre todo en el caso de equipos con sistemas eléctricos antiguos. A raíz de las carencias que se experimentan en las cadenas de suministro globales que provocan que el tiempo de espera para recibir algunos equipos electrónicos sea de más de un año, muchas empresas han tenido que buscar soluciones alternativas para poder volver a poner en marcha sus cadenas, sufriendo aun así un retraso en la producción.
- Expectativa de la atención al cliente y procesamiento de pedidos: en parte gracias a la eficiencia en las entregas del comercio electrónico, hemos podido ver a un mayor número de clientes exigiendo tiempos de entrega reducidos para los pedidos. Las obstrucciones en las operaciones provocadas por las incidencias en las líneas de producción pueden escalar de manera rápida y llegar a suponer la cancelación de contratos y un impacto en la continuación de la actividad comercial.
- Evitar el inconveniente de reparar el equipo que esté experimentando fallos (p. ej. el argumento de que el tiempo es dinero): las horas que tanto el personal de gestión como de operación invierten en reparar el equipo que esté experimentando incidencias implicará sumar el dolor de cabeza a un día ya frenético.
- Evitar los gastos de "emergencia" por llamadas de última hora: es bastante común que tengas que pagar más dinero por una llamada de última hora para una reparación de emergencia cuando no hay más opciones disponibles.
- Los inconvenientes que acarrean las reparaciones a corto plazo: algunos intentos realizados con la buena intención de aliviar el sobrecalentamiento, como la apertura de la puerta del armario de distribución, pueden dar lugar a más problemas permitiendo la entrada de agentes contaminantes como la humedad, el polvo y la suciedad, lo que puede generar el mismo número de problemas como el exceso de calor. Pero este no es el único problema derivado de la apertura de puertas, ya que también pueden suponer un riesgo muy real para la salud y la seguridad.
Mantenimiento de los refrigeradores: Próximos pasos
Te recomendamos planificar una auditoría del estado de tus refrigeradores para poder aplicar las medidas necesarias para solucionar los posibles problemas antes de que surjan.
Durante uno de nuestros servicios gratuitos de auditoria energética y los controles de eficiencia, un miembro de nuestro equipo de expertos de Rittal puede realizar la inspección de hasta 10 refrigeradores, con lo que te podrás beneficiar de un asesoramiento práctico sobre posibles mejoras de rentabilidad y eficiencia energética de los refrigeradores.
Para instalaciones de gran tamaño, o en aquellas en las que se requiera una inspección más técnica, podemos organizar un servicio de auditoria energética y controles de eficiencia más integrales y avanzados realizados por uno de nuestros técnicos de nuestro Servicio Oficial mejor cualificados. Se llevarán a cabo una serie de comprobaciones detalladas sobre los equipos de refrigeración y los armarios de distribución para reunir así los datos necesarios para resolver los complejos problemas.
Te proporcionaremos información por escrito sobre las comprobaciones, incluido un asesoramiento para aumentar el valor añadido de tu negocio y las mejores prácticas para el futuro.